Abrimos las puertas.

Sabemos que las puertas no se abren solas, sino que las abrimos nosotros, sabemos que Jesús nos da las herramientas para que podamos generar bendiciones.
A mí me toca iniciar en este día, una bendición mas que es nuestro café imaginario, el cual queremos se transforme paulatinamente, en un referente en cuanto al pensamiento cristiano.
Sin prejuicios, ni preconceptos, con el principio básico que guía nuestras vidas que es: amar a Dios por sobre todas las cosas, y a nuestro prójimo como a nosotros mismos.

Qeda oficialmente inaugurado este espacio, Dios nos ayude a consolidarlo para su gloria y honra.